Ha llegado el verano, y con él, el calor. Con temperaturas que rondan los 40 grados y una noche tropical tras otra dan, nos quedamos con la sensación de no parar de sudar. En estos momentos, deseamos podernos dar un chapuzón o al menos estar sentados a la sombra de un árbol.
Como es sabido, el sudor regula la temperatura corporal. El líquido expulsado se evapora en la piel, refrescándola. El cuerpo puede llegar a contar con cuatro millones de glándulas sudoríparas, la mayoría de las cuales se encuentran en las axilas y la parte interior de los codos, así como en las palmas de las manos y las plantas de los pies. Normalmente, el ser humano pierde hasta un litro de líquido al día, pero esta cantidad puede aumentar considerablemente en caso de calor u esfuerzo físico. Lo que muchos no saben: el sudor reciente es inodoro. El olor que resulta desagradable a muchas personas solo se crea cuando las bacterias de la piel descomponen los ácidos grasos expulsados con el sudor.
Justamente en verano, buscamos una protección eficaz contra ese olor desagradable. Existe un amplio abanico de posibilidades, desde el spray hasta el roll-on, pasando por el stick. Como alternativa, cada vez más personas utilizan cremas desodorantes. Pero las diferencias no solo se encuentran en el modo de aplicación, sino ante todo en la eficacia.
Desodorante vs. antitranspirante
Un desodorante tapa el olor generado, pero no evita la sudoración. Las sustancias activas antibacterianas reducen el número de bacterias del sudor. En cambio, los antitranspirantes –como ya indica el nombre– actúan antes de que se forme el sudor. Prometen axilas secas durante un período prolongado, evitando el mal olor. Ello funciona a través de las sales de aluminio, que estrechan los canales sudoríparos. Debido a los posibles efectos dañinos de las sales de aluminio en la salud humana, los antitranspirantes se han ganado una mala fama. Así, se sospecha que este ingrediente crítico estimula el cáncer de mama y el Alzheimer, además de dañar el sistema nervioso. Las denominaciones habituales del aluminio como ingrediente son Aluminium Chlorohydrate, Aluminium Zirconium Tetrachlorohydrate, Ammonium Alum y Potassium Alum.
¿Por qué crema desodorante?
Los desodorantes clásicos en crema suelen estar envasados en botes, donde a través de los dedos es muy fácil que el producto entre en contacto con gérmenes. En el FRESH deodorant, esto es imposible. Alta tecnología: Gracias al dispensador en bomba Airless, el nuevo FRESH deodorant es extremamente higiénico. Otra gran ventaja de la crema es que se aprovecha mucho y al mismo tiempo cuida la piel, como en nuestro FRESH deodorant. El FRESH deodorant protege de olores no deseados, prescindiendo totalmente de sales de aluminio críticas y apoyando la función natural de la piel que regula el sudor. Se ha optado por la presentación inusual en forma de emulsión para aportar a la piel no solo sustancias desodorantes sino también aceites vegetales e hidratantes naturales. Estos aportan lípidos tratantes a la sensible piel axilar. La hierbaluisa, el agua de naranja y el bicarbonato de sodio surten un efecto desodorante y previenen olores.
Aplicación: Aplicar una pequeña cantidad de la crema desodorante en la piel limpia y dejar absorber; es mejor hacerlo después del baño o la ducha. Dado que la piel recién depilada es muy sensible, se recomienda darle un pequeño descanso antes de aplicar el desodorante. El FRESH deodorant es altamente eficaz, por lo que en casos normales, basta totalmente una sola aplicación (por la mañana, en las axilas recién lavadas).
Es bueno saber: Al pasarse a un desodorante natural, hay que darle tiempo al cuerpo. Al cabo de una o dos semanas volverá a transpirar de manera “normal”, y el desodorante natural surtirá el efecto correspondiente. Dado que no solo sudamos en las axilas, más de uno se quedará parado con la siguiente información: el FRESH deodorant también es ideal como desodorante para pies.